Repelón, Atlántico, 27 de agosto de 2025. El sur del Atlántico avanza con paso firme en la consolidación de un modelo de agronegocios que ya suma 2.062 hectáreas sembradas en palma de aceite, plátano y limón Tahití, beneficiando a 232 agricultores organizados en 14 asociaciones. Con este esfuerzo, la Gobernación del Atlántico proyecta la producción local hacia el mercado nacional e internacional, fortaleciendo la economía rural y generando ingresos sostenibles para las familias campesinas.
El Encuentro Agronegocios Sur del Atlántico, realizado este fin de semana en Repelón, reunió a productores, asociaciones agrícolas y aliados estratégicos en un recorrido por fincas productoras que hoy registran cosechas de 290 toneladas mensuales de palma de aceite y 65 toneladas mensuales de limón Tahití, valoradas en cerca de $400 millones al mes.
“El futuro del Atlántico lo tenemos que construir sobre la base de la agroindustria, con productos como la palma africana, el plátano y el limón Tahití, que representan un desarrollo agrícola ordenado y con visión de exportación”, afirmó el gobernador Eduardo Verano.
La secretaria de Desarrollo Económico, Marisabella Romero, aseguró que el objetivo es expandir estos beneficios a más municipios del departamento. “Queremos que campesinos de Campo de la Cruz, Santa Lucía, Manatí y todo el Atlántico accedan a esta alianza público-privada que convierte a nuestros productores en verdaderos empresarios del campo”, señaló.
Por su parte, el vicepresidente de Oleoflores, Carlos Murgas, resaltó la importancia de la asociatividad y la tecnificación: “Aquí trabajamos familias completas, manejando bien los créditos, cosechando y pensando en industrialización. Antes de que termine este cuatrienio tendremos el ‘packing house’ de limón en el sur del Atlántico para exportar jugo y fruta fresca”.
Los agricultores también destacaron el cambio en su calidad de vida. Fulton Parra, cultivador de palma africana en Repelón, expresó: “Con la producción mensual ya puedo sostener mis cultivos y generar empleo para seis trabajadores. La gobernación nos dio el impulso inicial con agua, luz y asistencia técnica, y hoy nuestros predios han multiplicado su valor”.
Con créditos asociativos por más de $30.000 millones gestionados con el Banco Agrario, este modelo de agronegocios se consolida como una estrategia de desarrollo económico y social, basada en la unión de lo público y lo privado y en el enorme potencial agrícola del Atlántico.
*Prensa Gobernación.