A la celebración de la fiesta patronal de la Virgen del Carmen cumplida este martes, 16 de julio, en el municipio de Puerto Colombia y luego en el barrio El Prado de Barranquilla, se sumó el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano.
El mandatario atendió la invitación del arzobispo de Barranquilla, monseñor, Pablo Salas, la primera a los actos enhonor a la patrona del municipio de Puerto Colombia en la iglesia que lleva su mismo nombre, Nuestra Señora del Carmen.
Verano en compañía de la secretaría de Cultura, Verónica Cantillo; la secretaria de la Mujer, María Lourdes Dávila; la gerente de Capital Social, Karina Llanos; y el secretario de la Ciudadela Universidad de la Universidad delAtlánico, Óscar Pantoja, escuchó el mensaje dado por el alto jerarca católico a los porteños.
En su sermón, monseñor Pablo Salas exhortó a la feligresía a dos cosas: frenar un poco la aceleración cotidiana y procurar por un espacio personal para la integración profunda consigo mismo.
«Necesitamos parar un poquito y pedir el ánimo de Dios por el silencio, por el recogimiento, por la contemplación. Necesitamos el ánimo de esta fuerza de la vida, de la fe silenciosa», agregó.
El jerarca católico manifestó que Dios siempre ha dado señales sus fieles y en los actuales momentos, en los que todo se ha vuelto difícil, más han sido las alertas.
«Hermanos, Dios no ha dejado de darnos señales. Dios sigue dando señales a nuestra humanidad. Dios no se va a dejar de dar respuestas al hombre, porque el hombre no puede vivir sin respuestas, solo que no las encuentra», precisó al tiempo que invito a todos a mirar hacia el yo interior que allí están las respuestas que busca cada uno.
El arzobispo concluyó insistiendo en la necesidad de abrazar a Dios. «Sí, hermanos, eso es necesario y necesitamos espacios para eso. Vaya a un lugar a rezar con el Señor la palabra».
Culminada la misa, el mandatario de los atlanticenses compartió un almuerzo con los integrantes de las Cofradías de la Virgen del Carmen de Puerto Colombia, en la casa cural, en donde recibió un escapulario.
Posteriormente, el acompañamiento del gobernador Verano en la celebración de la Virgen del Carmen finalizó en el barrio El Prado, en donde participó en dos tradicionales eventos en la emblemática a parroquia de la carrera 50 con calle 56 a la que asistieron fieles barranquilleros.
El mandatario estuvo en la celebración de la misa y en la procesión alrededor de la iglesia para terminar así otra manifestación de apoyo a las expresiones culturales y religiosas del Atlántico.
